Salvador Illa se encuentra en un momento crucial, con la responsabilidad de asumir la presidencia de la Generalitat. Ha sido respaldado por cientos de miles de votantes del PSC, así como por aquellos que, sin ser socialistas, confían en él como un cambio de ciclo. Además, ahora debe colaborar con sus futuros socios para mejorar la vida de los catalanes.
Desde 2019, Illa ha contado con el apoyo de Pedro Sánchez, lo que demuestra la confianza que el presidente del Gobierno tiene en él. Sin embargo, es importante que Illa pueda manejar esa confianza de manera adecuada. Tanto él como Sánchez deben recordar la frase de José Montilla a Rodríguez Zapatero: «José Luis te queremos mucho, pero queremos más a Catalunya». Los catalanes merecen un presidente que defienda sus intereses, al igual que otros presidentes regionales defienden los de sus respectivas comunidades autónomas.
Es fundamental que la prensa no utilice la acusación de «independentista» para desacreditar a aquellos que defienden los intereses de Catalunya. Illa tiene la valentía y la responsabilidad de representar a su comunidad de manera justa y firme. A pesar de los desafíos que ha enfrentado durante la pandemia, se espera que responda a las expectativas de sus electores y haga todo lo posible por mejorar la situación en Catalunya.