El equipo Red Bull se encuentra en un momento crítico mientras se acerca el Gran Premio de Estados Unidos. A pesar de liderar el campeonato con una ventaja de 52 puntos, Max Verstappen y su equipo están viendo cómo McLaren, con Lando Norris al frente, se convierte en un serio competidor en esta etapa final de la temporada de Fórmula 1.
En las últimas carreras, Red Bull ha mostrado un rendimiento inferior en comparación con sus rivales, especialmente en Singapur, donde Max logró un segundo puesto mientras Norris se llevaba la victoria con una amplia ventaja. Este resultado ha generado preocupación en el equipo de Milton Keynes, que ha trabajado arduamente durante el parón de tres semanas para introducir mejoras en el coche de cara al Gran Premio de Austin.
Max Verstappen se muestra optimista y confiado en que lo peor ya ha pasado, afirmando que esperan dar pasos adelante a partir de ahora. El tricampeón ha destacado que han realizado cambios en el coche y esperan ser más competitivos en el próximo circuito. A pesar de la presión de McLaren, Ferrari y Mercedes, Verstappen sigue dependiendo de sí mismo para lograr su cuarto título y está listo para enfrentar el desafío.
McLaren llega a esta etapa final de la temporada con un rendimiento destacado, lo que pone a Red Bull a prueba para mantener su liderazgo en el campeonato de pilotos. El Gran Premio de Austin será crucial para determinar si las mejoras en el RB29 serán suficientes para contener a Norris y sus competidores, o si la ventaja de Red Bull seguirá reduciéndose en las próximas carreras.