El feminismo se alza en las calles contra el retroceso patriarcal
El feminismo continúa demostrando su fuerza y vitalidad en un contexto global marcado por una ola reaccionaria. La lucha por la igualdad de género se presenta como un imperativo ineludible y más necesario que nunca. Bajo este espíritu, el movimiento feminista convoca una vez más a tomar las calles en el Día Internacional de la Mujer, cada 8 de marzo. A pesar de las lluvias que han marcado gran parte del país, las manifestaciones y protestas han arrancado al mediodía en decenas de ciudades y pueblos.
La voz del feminismo en Madrid
Poco después del mediodía, Madrid ha sido escenario de una marcha bajo una lluvia persistente. Una de las portavoces de la convocatoria, Olga Navarro, ha expresado su preocupación por la grave situación mundial, marcada por el avance de la ultraderecha y la amenaza a los derechos ya conquistados. Su compañera, Katy Solórzano, ha reivindicado un feminismo antirracista que aboga por la igualdad de derechos para todas las personas, sin excepción.
Las manifestaciones en distintas ciudades han evidenciado las divisiones internas del movimiento feminista en torno a cuestiones como la prostitución y los derechos de las personas trans. A pesar de estas diferencias, todas las manifestaciones coinciden en la importancia de hacer frente al auge de movimientos reaccionarios y al rearme patriarcal a nivel internacional.
Testimonios de lucha
En medio de la marea de paraguas que inundó las calles de Madrid, Isabel, de 76 años, ha compartido su experiencia de lucha feminista desde los 16 años, cuando las manifestaciones estaban prohibidas. Para ella, la violencia machista es una de las principales razones para seguir manifestándose, destacando la falta de recursos y protección para las mujeres víctimas de violencia.
Desde Asturias a Gijón, miles de personas han marchado exigiendo el aborto libre, seguro y gratuito, la coeducación en las escuelas y otras demandas fundamentales para la igualdad de género. En Toledo, a pesar de la lluvia, cientos de manifestantes han desafiado las inclemencias del tiempo para alzar la voz contra el patriarcado.
Un grito unánime por la igualdad
En Valencia, bajo el lema ‘Els feminismes recordem, resistim i construïm des de la rebel·lia. Transfeminismes antiracistes de València’, las participantes han destacado la importancia de cambiar los paradigmas de género, racismo y clase. En Barcelona, un grupo de mujeres en residencias ha liderado la marcha, reafirmando su lucha contra el maltrato y a favor de la igualdad.
En Sevilla, dos manifestaciones paralelas han recorrido las calles, unidas en la reivindicación de los derechos de las mujeres y la igualdad como objetivo definitivo. En Zaragoza, cientos de personas han llenado las calles en una marea feminista convocada por distintas asociaciones, demostrando la diversidad y fuerza del movimiento.
A pesar de las lluvias y adversidades, el feminismo ha demostrado una vez más su determinación y resistencia en cada rincón de España. Llueva o nieve, las feministas continúan movilizándose en su lucha por la igualdad de género.
