Camboya ha dado inicio a la construcción de un canal financiado por China que ha generado controversia debido a preocupaciones medioambientales y posibles tensiones con Vietnam. Este canal, llamado Funan Techo, tiene una extensión de 180 kilómetros y un costo de 1.700 millones de dólares, buscando unir la capital Nom Pen con la provincia de Kep en la costa sur, brindando acceso al golfo de Tailandia.
El objetivo principal de este proyecto es reducir los costos de envío de mercancías al puerto marítimo de aguas profundas de Camboya, Sihanoukville, y disminuir la dependencia de los puertos vietnamitas. Sin embargo, ha generado preocupación en Vietnam debido a los posibles efectos en la producción de arroz en el delta del Mekong y por el cambio en las rutas de exportación que podrían perjudicar a los puertos vietnamitas.
A pesar de estas preocupaciones, el gobierno camboyano ha seguido adelante con el proyecto, destacando la importancia de China en la política y economía del país. Se espera que el canal, con una anchura de 100 metros y una profundidad de 5,4 metros, beneficie a la nación al mejorar las infraestructuras de transporte marítimo.
Esta iniciativa también se ha interpretado como un intento de la élite gobernante de fortalecer su posición en el gobierno, especialmente de Hun Manet, quien recientemente asumió el control del país. El proyecto ha sido presentado como un símbolo de prestigio nacional y desarrollo para Camboya, a pesar de las posibles repercusiones medioambientales en el delta del Mekong.
A pesar de las advertencias de grupos internacionales sobre los impactos transfronterizos en la disponibilidad de agua y la producción agrícola en Vietnam, el gobierno camboyano ha minimizado estas preocupaciones. Mientras tanto, expertos han señalado que hay una delicada relación entre Camboya y Vietnam, lo cual podría influir en la postura de Hanoi ante este proyecto.
En resumen, el canal de Camboya financiado por China ha generado controversia debido a sus posibles efectos medioambientales y tensiones diplomáticas con Vietnam, pero el gobierno camboyano está decidido a seguir adelante con la construcción de esta importante infraestructura para el país.
