¿Cómo sería comunicarte solo con el pensamiento? ¿Tener acceso a una base de datos similar a Wikipedia, o resolver problemas matemáticos complejos con la cabeza? Como sería, en definitiva, tener ChatGPT integrado en la cabeza. Esta pregunta, que alguna vez parecía extraída de la ciencia ficción, es hoy una realidad gracias a la colaboración entre Synchron y OpenAI.
La empresa Synchron, rival de Neuralink de Elon Musk, ha logrado integrar ChatGPT en sus interfaces cerebro-computadora (BCI). Su objetivo principal es promover la autonomía y la comunicación para personas con limitaciones severas de movilidad. El doctor Tom Oxley, CEO de Synchron, ha hablado sobre esta nueva alianza con Bloomberg.
Uno de los usuarios de Synchron, Mark, un paciente de ELA, ha experimentado los beneficios de esta tecnología. Para Mark, la capacidad de seleccionar respuestas generadas por ChatGPT ha reducido su estrés y le ha ahorrado tiempo y energía. La integración ha mejorado su comunicación y le ha permitido mantener relaciones personales y una vida activa de forma más eficiente.
El Dr. Oxley destaca que la versión multimodal de GPT-4o es un avance significativo que ha permitido esta integración. Esta versión puede procesar entradas de audio, visión y texto en tiempo real, actuando como una extensión del cerebro del usuario y facilitando la interacción de manera intuitiva y natural.
A pesar de los avances, Synchron se preocupa por la protección de los datos cerebrales de sus usuarios. La empresa asegura que no comparte información con OpenAI y trabaja en sistemas de encriptación sólidos para mantener la privacidad. Este enfoque ético es fundamental para ganarse la confianza de los usuarios y el público en general.
En comparación con Neuralink de Elon Musk, Synchron se mantiene abierta a futuras integraciones con otras tecnologías para beneficiar a sus usuarios. Oxley y su equipo visualizan un futuro en el que los implantes no solo faciliten respuestas, sino que también introduzcan automatizaciones que mejoren la calidad de vida de los usuarios, desde la gestión de citas médicas hasta la interacción con dispositivos del hogar.
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En resumen, la integración de ChatGPT en interfaces cerebro-computadora representa un avance significativo en la comunicación y autonomía de personas con limitaciones de movilidad. A pesar de las preocupaciones éticas y de privacidad, esta tecnología promete mejorar la calidad de vida de los usuarios y abrir nuevas posibilidades en el campo de la inteligencia artificial.
