El equipo juvenil del Girona logró un empate contra el PSV neerlandés en Eindhoven, manteniendo así su racha invicta en la Liga de Campeones Juvenil. Con dos victorias y dos empates en las primeras cuatro jornadas, el equipo tiene grandes posibilidades de avanzar a las eliminatorias.
A pesar de que el PSV se adelantó en el marcador gracias a un gol de Manuel Bahaty, el Girona logró empatar con un autogol de Robin van Duiven. El equipo catalán dominó el partido después de que Nicolas Verkooijen fuera expulsado por doble amonestación, dejando al PSV con un jugador menos.
A pesar de la ausencia de jugadores clave como Selvi Clua, Enric García y Minsu Kim, el Girona logró mantener la presión sobre su rival y controlar el juego. A pesar de no conseguir la victoria, el equipo demostró una gran actuación en un partido difícil.
Es importante destacar que estos tres jugadores clave fueron convocados por el primer equipo del Girona debido a un gran número de lesiones. A pesar de estas ausencias, el equipo juvenil demostró su fortaleza y determinación en el campo.
El entrenador Sergi Mora ha logrado construir un equipo sólido y competitivo que ha sabido enfrentarse a los desafíos de la Liga de Campeones Juvenil. Con un juego disciplinado y táctico, el Girona ha demostrado que tiene el talento y la determinación necesarios para competir al más alto nivel.
Los aficionados del Girona están entusiasmados con el rendimiento de su equipo juvenil y confían en que puedan seguir cosechando éxitos en la Liga de Campeones Juvenil. Con una mezcla de juventud y experiencia, el Girona está demostrando que tiene un futuro brillante por delante en el mundo del fútbol.