Ronnie O’Sullivan, una de las leyendas del snooker, ha sido muy autocrítico con su actual estado de forma después de su eliminación en la primera ronda del Abierto de Inglaterra. El talentoso jugador perdió 4-2 ante He Guoqiang, sumando otra derrota a la sufrida hace dos semanas en los cuartos de final del Masters de Arabia Saudí.
En una entrevista con The Sun, O’Sullivan admitió sentirse «terrible» y «vergonzoso» por su rendimiento en la mesa. El siete veces campeón del mundo se descartó a sí mismo para lograr un octavo título en el futuro cercano, afirmando: «No me queda mucho tiempo, no estoy jugando lo suficientemente bien. No tiene sentido siquiera preocuparse por eso. Simplemente lo he aceptado, lo cual es una situación bastante agradable en la que estar realmente».
El jugador también mencionó su decisión de jugar con la mano izquierda en ocasiones, explicando: «Si voy a jugar mal, mejor que lo haga con la mano izquierda. Juega con la mano izquierda y disfrútalo, pero sé inútil, o juega con la mano derecha, sé inútil y no lo disfrutes».
O’Sullivan reconoció que ha estado experimentando un mal momento de juego durante los últimos años, incluso en los torneos que ha ganado. A pesar de tener 41 títulos en su palmarés, el último obtenido en el World Grand Prix en enero de este año, el jugador ha tenido dificultades para mantener su nivel.
En cuanto a las críticas sobre si ha perdido su instinto competitivo, O’Sullivan respondió: «Ni siquiera me importa, sólo estoy aquí para cumplir con mis compromisos con mis patrocinadores, alejarme de casa, viajar. Si puedo aprovecharlo un par de años será genial, si no, no puedo. Sólo quiero sacarle todo lo que pueda, no voy a volverme loco».
A finales de 2023, Ronnie O’Sullivan decidió retirarse temporalmente de la competición para cuidar su salud mental. Antes de esta pausa, el jugador había compartido su lucha contra el alcohol y las drogas, reconociendo que tuvo que aprender que la felicidad es un trabajo interno.
En resumen, O’Sullivan ha sido sincero sobre sus limitaciones actuales y su falta de motivación para competir al más alto nivel. Aunque su talento y trayectoria lo convierten en una leyenda del snooker, el jugador está atravesando un periodo de reflexión y aceptación sobre su situación en el deporte.