El impacto del coronavirus en Italia va más allá de la crisis de salud y comienza a afectar a la economía del país. Cada vez más países están recomendando evitar viajar a Italia, como Bosnia, Irlanda, Croacia o Israel, y España para ciertas zonas, lo que ha provocado una caída drástica en las reservas turísticas. La cancelación del carnaval de Venecia, el cierre de espectáculos musicales y teatrales, y la cancelación de ferias y congresos como el Salón del Mueble de Milán fueron las primeras señales. En España, el sector turístico observa la evolución de la crisis sin proporcionar datos concretos sobre el impacto hasta el momento. Aunque hay un mensaje general de tranquilidad, preocupa la disminución de reservas en Italia.
El turismo, que representa el 12% de la economía italiana con una facturación de 146.000 millones de euros, está sintiendo el impacto de las cancelaciones. Italia, el quinto país más visitado del mundo, está en alerta y la industria turística advierte que unos 60,000 empleos están en juego. La verdadera prueba será Semana Santa, ya que los operadores temen que se cumplan las peores previsiones. Ciudades como Nápoles han perdido 15,000 visitantes y se espera una caída del 30% en la demanda para el período vacacional. Venecia ya ha experimentado un 40% de cancelaciones, y la región de Lacio, con Roma como principal foco turístico, ha visto una caída del 60% en las reservas.
Además de la ausencia previsible de turistas chinos en los próximos meses, ahora también se suma el miedo de los europeos a viajar a Italia. La portavoz del gremio hotelero de la región Friuli Venecia Giulia, Paola Schneider, ha mencionado que el sector está al borde del colapso con cancelaciones de hasta el 80% en las ciudades y hasta el 95% en las zonas montañosas. Los turistas de países que imponen cuarentenas a sus ciudadanos al regresar de zonas de riesgo también quieren evitar pasar por esa situación.
En España, los agentes turísticos también sienten el temor de viajar a Italia. Carlos Garrido, vicepresidente de la Confederación Española de Agencias de Viajes, ha mencionado que hay cancelaciones moderadas en toda Italia y un poco más fuertes en el norte del país. La situación está completamente paralizada en China, pero de momento no afecta a otros destinos. Aunque no se han publicado cifras sobre el impacto en España, las expectativas son buenas para destinos como Ibiza o Canarias.
A pesar de los cuatro casos positivos por coronavirus en un hotel del sur de Tenerife, el ritmo turístico en Canarias apenas ha variado. Algunos turistas han cancelado sus reservas a última hora por miedo a una epidemia, pero no se considera un número significativo. Los turistas confinados en el hotel de Adeje, en su mayoría jubilados británicos, belgas y alemanes, se toman la situación con calma y continúan disfrutando de sus vacaciones. El alcalde de la localidad, José Miguel Rodríguez, reconoce la preocupación por un posible impacto en el turismo, pero las autoridades están tranquilas y recuerdan que España cuenta con un sistema de salud de primer nivel.